La calidad del agua potable en Uruguay es indiscutida, ya que se realizan exhaustivos controles en los más de 80 laboratorios apostados en el país, según estableció el titular de OSE, Milton Machado. Esta red de laboratorios realiza al año 50.000 análisis que aseguran la calidad y potabilidad del agua que se le entrega a la población, trabajo que se suma al control de efluentes vertidos por las plantas depuradoras.
OSE dispone de un Sistema Integrado de Gestión de Laboratorios, que se compone por un laboratorio central equipado con alta tecnología, una red de 10 laboratorios regionales y otros 70 instalados en cada planta potabilizadora. Se realizan más de 50.000 análisis por año, lo cual permite “entregarle a la población agua segura, potable y que cumple con la normativa”, aseguró el presidente del organismo estatal, Milton Machado.
Para el agua ambiental y residual, se utilizan un laboratorio central, cinco laboratorios ambientales y laboratorios de planta de tratamiento de aguas residuales. Sus principales cometidos son monitorear la evaluación analítica rutinaria de la calidad del agua potable, desde su producción hasta su distribución, y el control de calidad de los efluentes vertidos por las plantas de depuración de aguas residuales en los distintos cursos de agua del país.
"El contar con técnicos capacitados, infraestructura e instrumental adecuados y trabajar bajo los requerimientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) nos permite aseverar que la calidad del agua que se entrega es apta para consumo humano”, concluyó Machado.
OSE dispone de un Sistema Integrado de Gestión de Laboratorios, que se compone por un laboratorio central equipado con alta tecnología, una red de 10 laboratorios regionales y otros 70 instalados en cada planta potabilizadora. Se realizan más de 50.000 análisis por año, lo cual permite “entregarle a la población agua segura, potable y que cumple con la normativa”, aseguró el presidente del organismo estatal, Milton Machado.
Para el agua ambiental y residual, se utilizan un laboratorio central, cinco laboratorios ambientales y laboratorios de planta de tratamiento de aguas residuales. Sus principales cometidos son monitorear la evaluación analítica rutinaria de la calidad del agua potable, desde su producción hasta su distribución, y el control de calidad de los efluentes vertidos por las plantas de depuración de aguas residuales en los distintos cursos de agua del país.
"El contar con técnicos capacitados, infraestructura e instrumental adecuados y trabajar bajo los requerimientos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) nos permite aseverar que la calidad del agua que se entrega es apta para consumo humano”, concluyó Machado.
